México D.F., a martes 26 de mayo de 2009
B-05-92
“Contra la guerra puede decirse: Que hace estúpido al vencedor, malicioso al vencido. En favor de la guerra: que al producir esos dos efectos, barbariza, y por lo tanto se vuelve más natural; es el invierno o periodo de hibernación de la cultura, del que la humanidad emerge más fuerte para el bien y para el mal”. Friedrich Nietzsche, 1844-1900.
LOS NEGOCIOS Y EL GO: ENSEÑANZAS DE LAS ESQUINAS DEL TABLERO
Algunas enseñanzas para los negocios desde el GO es lo que les traigo, sin ninguna pretensión, en este artículo.
El Tablero del GO nos brinda una serie de enseñanzas para los negocios. Ya en nuestros dos anteriores artículos mencionábamos que el objetivo del juego es hacer “territorios”, que mencionamos en plural, pues, en la extensión del tablero podemos construir no uno, sino una serie de territorios de diferente dimensión, de acuerdo a nuestras posibilidades y oportunidades.
Al empresario, estoy seguro que alguna de las palabras le deben resultar familiares, pues cuando emprendemos un negocio buscamos en primer lugar nuestro público objetivo o “nicho de mercado”: que vienen precisamente a ser los “territorios” del GO.
Un negocio, entre otras consideraciones, se basa en un estudio de mercado, que nos establece la demanda insatisfecha: Y cada mercado -interno o externo- nos ofrece una oportunidad de atenderlos, con la venta de nuestros productos o servicios.
Ahora bien, al tablero cuadriculado del GO, conformado por 19 líneas verticales y 19 horizontales podemos dividirlo en cuatro esquinas, cuatro lados y el centro del tablero. Espacio en el que los jugadores tienen la libertad de colocar sus fichas en cualquiera de las 161 intersecciones de dichas líneas.
Si quisiéramos formar nuestros territorios, indudablemente, podríamos cumplir con mayor facilidad este cometido en las esquinas, por ser estos los sectores que requieren menor cantidad de fichas, a diferencia de lo que sucede con los lados y el centro.
Esto nos puede traer a colación la dimensión de una empresa (centro del tablero), pues sabido es que mientras más grande esta sea, por su complejidad, requerirá mayor uso de recursos. Y en esa proporción el cumplimiento de más obligaciones con el país donde está funcionando, sean estas de orden tributario, ambiental, aduanero, patronal o municipal, entre otras.
Una pequeña (PYME) o mediana empresa (MYPE), por el contrario, requiere menos inversión y recursos (esquinas del tablero); pero el simple hecho de tenerlas en marcha no obliga a otras, de igual giro, a dejar de competir con ellas ofreciendo mejores y mayores ventajas comparativas en calidad, precios y servicios. En el juego también se presenta una situación similar, no basta tener los territorios: Hay que defenderlos de la invasión de nuestro adversario (competencia para el caso de las empresas).
Las esquinas del tablero del GO para una empresa son un cúmulo de enseñanzas. Así tenemos que para poder crecer (ocupar el resto del tablero), debemos tener sólidos territorios (clientes satisfechos, fidelizados, precios comparativos y asequibles, calidad y un buen servicio, entre otros.).
Otra forma de aplicación práctica para las PYMES o MYPES, muy de moda en nuestros días, no solo en nuestro país, sino en la zona del Asia Pacifico, estaría dada por relacionarlas directamente con las esquinas del GO. En cuyo caso, si trataran de afrontar nuevos retos u oportunidades de negocios -aprovechando las ventajas de los Tratados de Libre Comercio (TLC) y otros convenios comerciales- deberían optar por asociarse entre ellas (sumatoria de territorios en el tablero), a fin de poder actuar con una mejor posición, incluso, si se tratase de afrontar la demanda interna.
En diferentes publicaciones de antaño y recientes, en las cuales se analiza y estudia a empresas exitosas y florecientes, que sirven de ejemplo, para sus pares del mismo sector o giro, es costumbre hablar de sus inicios. Vale decir, cuándo y con que capital empezó, cuál fue su volumen de ventas, número de trabajadores, políticas empresariales desplegadas: Lo que, siguiendo con el ejemplo práctico, estaría tratando de analizar una esquina.
Todo esto, desde luego, sin olvidar que un territorio en el GO, si es muy pequeño, la cadena de fichas que lo delimita, debe necesariamente contar con “dos ojos”. Dualidad que nos recuerda la transparencia en nuestros negocios, pues no basta ser eficientes y eficaces en el campo empresarial, también cuenta la parte ética y moral. De allí que exista la voluntad de no solo formar buenos técnicos y profesionales, sino también, valga la redundancia, buenos ciudadanos.
La transparencia (dos ojos), de manera práctica, nos orientaría en un serio manejo de una diversidad de temas. Por citar algunos: Los de carácter tributario, ambiental, municipal, cumplimiento de plazos establecidos, formas de negociar, así como el buen trato al personal a su cargo, responsabilidad con el entorno.
Para finalizar, debo añadir, que por su inspiración en la filosofía budista, el GO enseña a quienes lo practican, a compartir y combatir toda manifestación de angurria; ventajas que los empresarios bien podrían asumir en su dimensión. Por ejemplo en la participación de utilidades, no solo a nivel de accionistas, sino de sus trabajadores, en políticas de responsabilidad social, a favor de las comunidades de su entorno y también en lo que concierne a la capacitación del personal.
Espero una vez más haber motivado en los amables lectores su curiosidad por este maravilloso juego que cuenta con más de 50 millones de aficionados en el mundo, el que, en estos tiempos de incesante adelanto tecnológico, se puede practicar sin límite de edad, sexo y distancia. Sobretodo hoy gracias a las ventajas que ofrece el Internet (http://www.gokgs.com).
Dirección General
Enrique R. Del Castillo G. M.D.