viernes, 14 de diciembre de 2012

GENIO Y FIGURA / ARMONÍA = PAZ = TIEMPO




GABY VARGAS

Eran las seis de la mañana. Recuerdo perfectamente el lugar en donde sucedió. Fue una experiencia que duró segundos y, aun así, quedó grabada en mí para siempre.

Estaba sola y entré en el aeropuerto de la Ciudad de México para tomar un vuelo a alguna ciudad de la República. Mientras me dirigía al mostrador para documentar, sorpresivamente tuve una sensación difícil de explicar. Fue como si un rayo de luz saliera de mi corazón y se conectara con el universo. Sentí una profunda armonía, plenitud, bienestar y paz.

Esa fue la primera vez que la viví y fue una experiencia tan placentera, que desde entonces he buscado experimentarla de nuevo. Como además he estado varias veces enferma, incluso en una ocasión hospitalizada a causa del estrés y la falta de armonía en mi vida, me he dedicado a investigar el tema.

Han pasado ya varios años desde ese día en el que pude atisbar que la sensación de armonía es la más cercana a la felicidad. Me refiero a la armonía contigo mismo, con los otros y con la existencia.

Lo que hoy, tiempo después, puedo afirmar es que sentirnos en armonía es una decisión: una decisión de vida que depende de cada quien y de una intención constante, pues la armonía es inestable, algo que hay que trabajar todos los días.



¿QUÉ CONTRIBUYE A SENTIRNOS EN PAZ Y EN ARMONÍA?

El concepto de paz de los sufíes me parece precioso. Para ellos, la razón de la existencia es simplemente alcanzar la paz. No puede haber un dios en ti si no estás en paz. Así de simple.

Según los sufíes, si hay algo que los dioses tienen en abundancia es tiempo. Cuando Dios nos insufló la paz, nos insufló el tiempo. Así que un hombre tranquilo lo que tiene es tiempo. Es fácil de concebir, pero sólo imagina que a tu día le añadieras cinco o diez horas, habría mayor tranquilidad en tu vida, ¿cierto?

Así que si quieres sentirte en paz, lo primero que tienes que buscar es tiempo. Tiempo para ti, tiempo para el amor, tiempo para tu familia, tiempo para tu trabajo, tiempo para divertirte, en fin, para lo que lo necesites.

Suena sencillo; sin embargo, aplicarlo a la realidad no siempre es fácil de lograr. Recordemos a Nietzsche, quien decía que lo más erótico que puedes darle a una relación es tiempo.

Hagas lo que hagas, si lo haces con tiempo, lo haces mejor. Y la satisfacción de lo bien hecho es lo que te hace vivir en paz contigo mismo. Ojo: no importa si el resultado de aquello a lo que dedicaste tu tiempo es bueno o malo, mejor o peor; lo importante es que sepas que pusiste todo el corazón y diste lo mejor de ti.

Por otro lado, a veces tenemos el tiempo y lo desperdiciamos, no hacemos con él nada que nos satisfaga. Pero si tienes la actitud adecuada para tus propósitos y buscas el tiempo y lo aprovechas, la vida te regala la oportunidad de sentirte en paz. Es tu decisión.

Este concepto de paz de los sufíes es completamente diferente al que nos ha enseñado la tradición judeocristiana, porque en ella, detrás de un hombre pacífico puede estar la apatía como  esencia.

En cambio, en el sufismo no. Según sus preceptos, tiene que darse una proactividad para que haya satisfacción. Y es de esa satisfacción que surge el enamoramiento de uno mismo, lo que nos lleva a amarnos, a estar satisfechos y, por ende, a sentirnos en paz.

Nadie puede vivir en paz si no está satisfecho consigo. La insatisfacción hace que la vida se convierta en anti-vida. Si partimos de ella, todo lo que hagamos será un intento por encubrirla, buscaremos el control, el poder y causaremos daño al otro.

Podríamos decir que la palabra "armonía" significa la actividad del amor. Y para estar en armonía, el amor a uno mismo es lo primero. Amor que deriva de sentirse satisfecho, de haber dado lo mejor a la familia, al trabajo y al País.


HAY MUCHO QUE APRENDER DE LOS SUFÍES...

"Sentirnos en armonía es una decisión: una decisión de vida que depende de cada quien y de una intención constante, pues la armonía es inestable, algo que hay que trabajar todos los días".


GABY VARGAS